Hasta lo más alto que se pudo.

Ya lo sabéis: no pensaba subir al Montarto, ni mucho menos.  La subida a la Restanca se me hizo un palo insufrible, así que se llegó hasta lo más alto que se pudo. La bajada y el paseo desde Pont de Rius a Pont de Resec merecieron la pena.  El ambiente de Valartiés es fresco, desierto y salvaje, una maravilla. Lo tengo crudo para desterrar el sedentarismo de mi arrastrada existencia, así que seguiremos viviendo la felicidad a pequeños sorbos como este. El año que viene más, porque siempre se puede un poco más.

9 comentarios en “Hasta lo más alto que se pudo.

  1. No te rompas la cabeza Gonzalo, habra o no habra atajo, pero el desnivel sera el mismo, yo tambien disfrute como un enano y me quede con la miel en los labios y eso que mi señora me dijo que la dejara alli en el ultimo collado y la recojiese a la vuelta, pero era una imprudencia asi que otro año sera… el proximo año a mi señora le dare una excursion a Luchon que hay telesferico jajaja

  2. ¿Un atajillo? ¡No me digas que detrás de un árbol hay unas escaleras mecánicas, como en el Tajo Bretón!
    Ya tenía asumido que no iba a llegar muy lejos. Cada uno sabe cómo anda y no se puede pretender tirar para arriba sin haberse preparado un mínimo. Te aseguro que disfruté del paseo como un animal, que al fin y al cabo es de lo que se trataba. Los romanos se abrazaban poco, pero en cambio a menudo se declaraban la guerra, así que lo del abrazo traducido al latín quedaría más bien macarrónico. Por supuesto que no pienso declararte la guerra, Pepe, así que el abrazo nos lo damos la próxima vez que nos veamos y así salimos ganando los dos. ¿Qué te parece?

  3. Gonzalo Collar: ¿ Hacemos un trato ? Tu me enseñas las tecnicas de la «fluida escritura», y yo haciendo un esfuerzo sobrehumano y sin que sirva de precedente, te enseño un atajillo, o camino mas corto para eso de La Restanca.

    Seguro que sales ganando.

    Y ahora por favor traducete al latín lo siguiente :

    Un fuerte abrazo

  4. Collar.

    Los desconocidos bichos de color rojizo que nos pusieron en el aperitivo del hotel, después de una larga investigación, llegué a la conclusión de que efectivamente eran gambas, habitantes únicos y habituales de los lagos de Colomers.

    Abandonando tu estilo literario, ya que no puedo competir con él, he de dar fe que estabas en el pequeño grupo de grandes esquiadores de la compañía y que allí donde ella arribaba también estabas tu, eso si con algunos kilos menos.
    Las rutas de montaña sean mas largas o mas cortas, lo verdaderamente importante es disfrutarlas en todos los aspectos.

    Un abrazo

  5. ¿Así que tú también ves al psiquiatra argentino?
    En serio, hablamos. He aprovechado unos cuantos días de vacaciones para ir recuperando algo de forma nadando, como antaño, que es lo que mejor me ha ido desde siempre. Lo malo es que mañana empiezo otra vez con la marcha de currelante (y que no falte), así que procuraré hacer un esfuerzo extra.
    Amicis omnibus salutem multam (has empezado tú).

  6. ..te lo estás tomando en un diván con un argentino enfrente ???..mientras me respondes buscaré una respuesta a la altura que te mereces, en todo caso un poco mas arriba que La Restanca.
    Salutem in dei gratia, un abrazo, Luís.

  7. L V I S :
    No tengo la blanca, que no estuve en Viella ni hice allí la mili. Lo que he escrito en este blog es falso y apócrifo de plena apocrificidad, que me lo he inventado todo, lo confieso. Los compañeros que dicen haberme conocido sufren un proceso de obnubilación mental provocado por un duende maligno que les hace creer que estuvieron en la mili conmigo, ya sabes que esas cosas pasan por muy inverosímiles que parezcan. Si no lo ves claro te remito a cualquier telediario y verás lo que es la inverosimilitud. Yo mismo no existo, que soy un personaje creado por tu mente. No sé cómo no te habías dado cuenta.
    Por otro lado, ya sabes que sufro (en caso de existir) un proceso de litiasis renal, así que además de mi mochila de kilos y kilos de carne propia, que antes no tenía, tengo que subir la piedra del riñón, que no es que pese mucho, pero tara la moral y eso sí que pesa. Habría sido un desastre que hubiese llegado hasta arriba, pues a la altura del Montarto habría que haberle añadido la altura de la piedra en cuestión, que no es lo mismo que esté como que no esté, y si no está no cuenta, pero si está, tiene que contar. Eso habría sido un desastre de doble repercusión. Primero un desastre económico porque habríamos tenido que cambiar toda la cartografía vigente y segundo, un desatre ecológico porque la composición química de mi piedra será a todas luces distinta de la del entorno geológico de la cumbre. Así que volviéndome demostré un rasgo de responsabilidad que me honra, vamos que si me honra, me engrandece, que mola más.
    Sobre Simancas: como Barda se ponga las pilas te va a hacer una lista más larga que la carta de los Reyes Magos. No sé si decirle que vas para allá por la cuenta que te trae. Te lo digo en un arrebato deslumbrante de compañerismo. Ya ves que me preocupo por tí.
    ¿Que vienes a Zaragoza? No importa. Aquí te esperamos, que no te tenemos miedo.
    Espero haberte respondido como te mereces, que tú te lo mereces todo y más. Mientras escribía esto me estaba chupando un chupito bien frío de licor de nueces que me traje del viaje a Viella. No veas qué propiedades tiene (orgranoléktiquas, orgasmoléxtricas, flipantopléxticax, antiextimulántikax, ui, ke weno…!!!)

  8. Gonzalo….ni a la Restanca si quiera ???…necesito ver tu «blanca» o Cartilla Militar porque no me creo que hayas hecho la mili en Viella…En fin, si tu sedentarismo es físico no pasa nada, porque conversando contigo se aprecia que haces bastante gimnasia mental..Un abrazo, LUIS.

    Pronto iré a Simancas (en 2 o 3 semanas, díselo a Barda por si quiere algo), y en poco tiempo también a Zaragoza…

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