Hola a todos.
Yo soy uno de los afortunador que tuvo la ocasión de compartir algunas experiencias con vosotros. como ya comenté yo era en aquel momento viejo para la compañía (23 años) y mis condiciones físicas me impidieron ir desde un principio a la Compañía, no superé las pruebas físicas en San Clemente.
No obstante tuve la gran suerte de poder hacer los cursos de esquí y escalada, y de compartir esa maravillosa experiencia. De hecho pasé más tiempo en Viella que en Lérida.
Me permito adjuntas unas fotos del curso de escalada del 86, yo pertenecía al 5º llamamiento del 85 por lo que primero hicimos el curso de esquí (del que desgraciadamente no tengo fotos, aunque si un recuerdo imborrable) y luego el de escalada.
Añado otra foto, cruzando un nevero…
Recuerdo que a finales de Enero o en Febrero del 85 hubo una nevada impresionante. En una noche cayó cerca de un metro de nieve en Viella y mucho más en Baqueira. Los coches estaban completamente tapados por la nieve. En los días siguientes hubo una ola de frío tremenda y los conductores de los camiones tuvieron que turnarse para mantener los pocos camiones que quedaron operativos en funcionamiento durante la noche. Tuvieron que hacer varios viajes para subirnos a todos las pistas de esquí…
Al finalizar el curso de esquí se hacía una demostración ante los «gerandes jefes» de la División así que el Teniente de mi sección, perteneciente al cuerpo de Intendencia -la sección de Ingenieros estaba formada por un Teniente de Intendencia, 2 Sargentos y 1 Cabo Primero pertenecientes a Transmisiones y unos veinte miembros más entre Cabos y Soldados en su gran mayoría de Zapadores-, decidió que yo fuera el enlace del General al que se esperaba para la demostración. Yo no tenía ni idea de cómo funcionaba el aparato y recuerdo a un Teniente de Infantería que me decía, según nos daba instrucciones al conductor y a mí para ir a buscar al General al Parador (preguntad por el Tte. Coronel tal o cual…), «¿pero tú no eres de Ingenieros? Y yo le decía «sí mi Teniente, pero de Zapadores». Y él me replicaba «cojones, eres de Ingenieros y con eso basta». Así que nos fuimos el conductor yo al Parador a buscar al General. ¡Mi madre! En mi vida ví tantas estrellas juntas. Al final el TTe. Coronel nos dijo que el General no vendría por el mal tiempo ya que no era muy seguro el vuelo en helicóptero y que volviéramos al cuartel y estuviéramos disponibles por si al final decidía venir… cosa que no ocurrió.
Recuerdo también en las maniobras del final del curso de esquí que las raciones que nos dieron estaban caducadas y algunos tuvimos serios problemas intestinales. Hasta tal punto que hubo que cancelar una de las marchas previstas porque la mmayoría estábamos con vómitos y diarrea. Durante esos días en nuestra sección el arresto consistía en tener que ir a buscar las raciones hasta el aparcamiento de Beret y llevarlas a donde estábamos vivaqueando…
Recuerdo como algo estremecedor el día que estuvimos haciendo una marcha nocturna, foqueando para lkuego hacer un descenso impresionante hasta el campamento…
Son tantos y tantos recuerdos los que me vienen a la memoria…
ESQUIADORES ESCALADORES DE VIELLA 
¡A la orden mi Sargento!
En efecto tuvimos que coincidir. Del Sargento Vega me acuerdo, aunque él era de Transmisiones. Si mal no recuerdo solo iban él, un Cabo 1º y un soldado de la Cía de Transmisiones, el resto éramos Zapadores. De Barcelona venían Vd., un conductor y creo recordar que 2 Cabos y un Soldado.
Efectivamente fue un invierno inolvidable.
Siempre lo he dicho, y siempre lo diré. Soy un afortunado porque soy de los pocos a los que no le importaría repetir el Servicio Militar (en las mismas condiciones, claro). Me siento orgulloso de haber estado en el BMING 41 y haber estado en la Cía de Viella.
Hola:
Yo estuve en La Cía el invierno del 85 de Sargento “pistolo” con el TTe de Intendencia que citas y el Sgto. Marito Vega de Lérida, osea que nos debimos conocer.
Yo mandaba el pelotón del RMING 4 de Barcelona, que junto con los otros dos de Lérida formabamos la Secc. de Esquiadores de Ingenieros de la División URGEL nºIV
Fue un invierno inolvidable. Enhorabuena por el Blog.
Recuedos Ontiveros (las gafas de la muñeca de nieve son las mías, en la foto de grupo con la dama blanca las llevo puestas)
Revi , un abrazo y cada vez haces mejores fotos, del XXXVIII de Montaña teniais que ser.
A Roberto Santaufemia siempre mi admiración y agradecimiento y
a Pedro Anadón que decirte …un abrazo.
Saludos a todos los Esquiadores de Viella.
Miguel Ribes
Pues sí Carlos, fue una experiencia extraordinaria. Siempre he dicho que no me importaría volver a tener esa edad y repetir la experiencia.
Tengo un amigo, desde que teníamos 6 años, que hizo la mili voluntario en el Ejército del Aire, en Moncloa. Año y medio haciendo guardia día sí, día no. Cada vez que lo pienso se me ponen lo pelos de punta: ¡Cómo pudo aguantar eso! Yo recuerdomi servicio militar como algo mucho más emocionante, mucho más vivo… más edificante. Fue duro, pero maravilloso, una experiencia a la que no renunciaría por nada del mundo.
Un fuerte taconazo
Supongo, amigo José Luis, que estarás al corriente del próximo encuentro de septiembre (en el margen tienes enlaces a toda la información).
¿Porqué no te animas a pasar esos días con nosotros? Te aseguro que volverás a paladear aquellas sensaciones de antaño.
¡Venga, hombre…, anímate…!
Un abrazo.
No había leido tus impresiones, amigo y compañero de fatigas Ángel Luis, tú también viviste nuestras experiencias y no pudiste sustraerte a su embrujo.
Muy buenas fotos y narración.
Un saludo montañero.
!!!Un Taconazo compañero!!!